Esta entrada
la quiero dedicar al viaje realizado la semana pasada a Marruecos. Simplemente
hablar de lo que hemos encontrado allí y de las sensaciones que me han dado las
personas.
Tenía la
idea de que los marroquíes no eran gente de fiar. También pensaba que, como había
visto desde fuera, eran personas sucias, con poca educación…
Pero este
viaje me ha hecho cambiar de idea, en cuanto a las personas que nos han acogido
y a su entorno. Lo primero fue el colegio, era tan parecido al nuestro. Y a la
primera impresión de los chavales marroquíes era que eran diferentes, todos se
quedaban mirando fijamente, como analizándonos, igual nosotros a ellos.
El primer día
fue frío en cuanto a contacto, pero el segundo, con las actividades que nos tenían
preparadas ya fue bastante mejor. Fueron como uno más de nosotros, como si no
existieran diferencias culturales, ya incluso se estaba bastante cómodo
hablando con ellos. El contacto se hizo mayor cuando toco irnos a comer a sus
casas, ya allí conociendo a sus familias cambio totalmente nuestra idea sobre ellos.
Una vez más
la vida nos dio una lección, de nos juzgar a las personas por su apariencia.
David Barbecho.
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