Esta noticia
está basada en un estudio sociológico sobre los adolescentes. Es algo raro como
sin darnos cuenta y de forma inevitable, nos hemos plantado en un alto índice de
consumo tanto de drogas más comunes como el alcohol hasta de drogas “duras”
como el cannabis.
El abuso del
consumo de dichas sustancias puede dar lugar a consecuencias fatales para esta generación
y para las venideras.
Con este
texto solo quiero conseguir que las personas que lo lean replanteen lo que se
les está enseñando a nuestros sucesores y que reacciones o simplemente
aceptemos la realidad que existe ahora mismo.
Se me ocurrió hacer el crédito sobre este tema porque al hacer el trabajo de Educación Física me di cuenta de el gran contenido ético que tiene.
El fútbol podría ser un deporte que hiciera a los jugadores crecer como personas al igual que el baloncesto o el rugby o cualquier otro deporte de equipo, pero al ser un deporte tan famoso todos quieren ser los mejores para tener fama, lo que desemboca en juego sucio y corrupción. Por ejemplo en un partido de baloncesto cuando un jugador tira a otro lo normal es que el culpable del choque se disculpe si no en el momento al final del partido, pero en fútbol el hecho de que un jugador se disculpe o ayude a un contrario a levantarse es algo muy destacable. O el ejemplo de cuando un jugador no consigue regatear a otro se tira al suelo y reclama la falta sin embargo en el rugby esto seria algo impensable. También me sirve el ejemplo de José María del Nido expresidente del Sevilla, a quien se le va a encarcelar por robar dinero público del ayuntamiento de Marbella. Tambien el caso Neymar que consiste en que se ficho a el jugador por más dinero del que figuraba en el contrato.
En conclusión el fútbol es un deporte del cual se podrían sacar muchos buenos valores pero algunos han conseguido que solo se saquen malos valores, como la agrisividad que muestran muchos jugadores o la falta de respeto que muestran otros. Esto es muy triste porque es el deporte más visto por lo tanto hay más gente que aprenda cosas malas del deporte que la que aprende cosas buenas.
El Sahara occidental fue
provincia española hasta que en 1975 fue abandonada por el gobierno de Franco y
posteriormente ocupada por Marruecos en la llamada “marcha verde”. Ante esta invasión, gran parte de la población saharaui
se vio obligada a huir. Argelia les cedió una parte de su territorio, donde
establecieron los campamentos de refugiados. Durante 16 años el frente Polisario (Frente
Popular de Liberación de Saguía el Hamra y Río de Oro) estuvo luchando contra
los invasores hasta que se firmó el alto el fuego en 1991 y la ONU envió al
territorio una fuerza de paz. A fecha de hoy, 22 años después, aún no se ha logrado
firmar ningún referéndum para devolverle la autodeterminación al Sáhara.
Desde hace 40 años miles de
saharauis sobreviven en pésimas condiciones, esperando algún día regresar a sus
casas. Los que no pudieron huir permanecen en el Sáhara, ocupado por Marruecos,
y muchas veces se han denunciado las violaciones
de los derechos humanos que estos sufren: son detenidos sin pruebas, torturados,
perseguidos, etc.
“Hijas de la esperanza”
Este es un
pequeño documental de 19 minutos en el que se nos muestra la situación actual
de las mujeres saharauis. Las más pequeñas nos hablan de sus deseos, todas quieren llegar a trabajar
para poder ayudar a su pueblo. Quieren regresar a su tierra y no vivir exiliadas
con miedo. Las circunstancias políticas y sociales han hecho que la situación
de la mujer cambie. La mujer y el hombre, actualmente, no tienen tantas diferencias,
por un gran sueño que les une a todos, volver a su tierra, la que les fue
arrebatada. Las mujeres además de llevar la casa adelante, criar a sus hijos y
complacer a su marido, también han empezado a trabajar. Mientras que los
hombres luchaban para recuperar su tierra, han hecho lo imposible para que la
vida continúe en los campos. Tienen que ocuparse de los campamentos y
dejar a un lado la posición de sumisión
hacia los hombres y de vivir únicamente entre cuatro paredes.
Hoy en día lo más importante en los
campamentos es la enseñanza. La filosofía saharaui afirma que no se puede
construir un país sin la enseñanza de su juventud, para ello se están empezando
a crear, aparte de las escuelas, bibliotecas para el enriquecimiento cultural. Creo
que poco a poco están consiguiendo algo que , dada su situación, es bastante difícil, reconstruir su población y sus vidas. Todos quieren volver pero, mientras
tanto, tendrán que conformarse con vivir en el llamado “infierno” amenizándolo
durante su estancia en él.
Todos en este pueblo están
haciendo un gran esfuerzo por cambiar las cosas, cambiar su situación y poder
volver a sentirse libres después de tanto tiempo. Creo que todos deberíamos
participar en esta lucha. El problema
debe de solucionarse lo antes posible, aunque sea muy difícil encontrar una
solución con la que los dos bandos estén satisfechos.
Podría celebrarse el esperado
referéndum de autodeterminación ,
después de más de 19 años esperándolo, declarando el Sáhara una región libre y
devolviendo el territorio a los que realmente les pertenece. Si esto ocurre, muchos
de los saharauis exiliados no podrán votar y quizás los marroquís establecidos
en el Sáhara votarán a favor de que este territorio pertenezca a Marruecos de
forma oficial.
Otra solución sería la autonomía
del Sáhara bajo soberanía marroquí, así los saharauis recuperarían su territorio
y quizás Marruecos podría contentarse, pero este seguiría mandando en los
asuntos más importantes y aprovechándose de su poder.
Y la última solución sería
dividir el territorio en dos, dejando a Marruecos con la parte útil, que
concentra todos los recursos y explotaciones, y a los saharauis con la
otra. Esta solución además de injusta es improbable ya que esas
riquezas las querría recuperar el pueblo
al que realmente pertenece, y Marruecos saldría ganando.
No sé si es por mis experiencias en
Marruecos, pero el haber estado conviviendo con
su gente me hace sentir que éste también es mi problema. Creo que, al igual
que los españoles tenemos nuestro país y los marroquís el suyo, el Sáhara tiene
que volver a pertenecer a los saharauis
que llevan tanto tiempo luchando por él. Ninguno de nosotros podremos
llegar a sentir lo que se siente cuando te arrebatan tu propio país,
destruyendo todo lo que conoces y lo que
te importa, obligándote a empezar de
cero. Admiro como los saharauis han llegado a montar un pequeño país en esos
campos, creando su propio sistema de educación de la nada y dejando a un lado
sus ideales machistas. Sea cual sea la
solución, debe aplicarse cuanto antes para acabar con esta guerra que ha dejado
sin casa y sin recursos a miles de personas.